martes, 30 de noviembre de 2010

CUENTO ÁRABE.


A un oasis llega un joven, toma agua, se asea y pregunta a un viejecito que se encuentra descansando: ¿Qué clase de personas hay aquí?
El anciano le pregunta: ¿Qué clase de gente había en el lugar de donde tú vienes?

"Oh, un grupo de egoístas y malvados" replicó el joven.
"Estoy encantado de haberme ido de allí".

A lo cual el anciano comentó: "Lo mismo habrás de encontrar aquí".
Ese mismo día, otro joven se acercó a beber agua al oasis, y viendo al anciano, preguntó:
¿Qué clase de personas viven en este lugar?
El viejo respondió con la misma pregunta: ¿Qué clase de personas viven en el lugar de donde tú vienes?
"Un magnífico grupo de personas, honestas, amigables, hospitalarias, me duele mucho haberlos dejado".
"Lo mismo encontrarás tú aquí", respondió el anciano.

Un hombre que había escuchado ambas conversaciones le preguntó al viejo:
¿Cómo es posible dar dos respuestas tan diferentes a la misma pregunta?

A lo cuál el viejo contestó:
Cada uno lleva en su corazón el medio ambiente donde vive. Aquel que no encontró nada bueno en los lugares donde estuvo no podrá encontrar otra cosa aquí.
Aquel que encontró amigos allá podrá encontrar amigos aquí.

martes, 23 de noviembre de 2010

Mahoma.


Mahoma (La Meca, c. el 26 de abril de 570/571 — Medina, 8 de junio de 632) fue el profeta (nabi نبي) fundador del islam. Su nombre completo en lengua árabe es Abu l-Qasim Muhammad ibn ‘Abd Allāh al-Hashimi al-Qurashi del que, castellanizando su nombre coloquial Muhammad (مُحَمِّد), se obtiene Mahoma.
De acuerdo a la religión musulmana, Mahoma es considerado el "sello de los profetas" (jātim al-anbiyā' خاتم الأنبياء), por ser el último de una larga cadena de mensajeros, enviados por Dios para actualizar su mensaje, que según el islam, sería en esencia el mismo que habrían transmitido sus predecesores, entre los que se contarían Ibrahim (Abraham), Isa (Jesús) y Musa (Moisés).
Desde 595 hasta 619, Mahoma sólo tuvo una esposa, Jadiya, una rica mujer de La Meca que contaba 27 años (40 según otras fuentes) cuando se casó. Después de su muerte contrajo matrimonio con Sawdah, y al poco tiempo con Aisha, hija de Abu Bakr —quien posteriormente sucedería a Mahoma—. Según algunos hadices, Aisha tenía 6 años de edad cuando fue prometida al profeta, que tenía 54, aunque el matrimonio se consumó cuando ella tuvo 9. Hay, sin embargo, estudiosos musulmanes que creen que dichos datos son erróneos y que Aisha era considerablemente mayor.[6]
Pese a estas reinterpretaciones modernas de los hadices que adjudicarían a Aisha una edad más madura, una gran mayoría de los fieles musulmanes siguen aceptando actualmente las interpretaciones tradicionales. Esto último ha sido utilizado por críticos del islam, como Ibn Warraq, para sostener que los matrimonios infantiles que se siguen practicando en la actualidad en los países islámicos encuentran un argumento favorable en este posible precedente histórico[7]
Más tarde se casó con Hafsa, con Zaynab (quien era mujer de su hijo adoptivo Zaid), Ramlah, hija de un líder que combatió a Mahoma, y con Umm Salama, viuda de un combatiente musulmán.
También se casó con una cristiana de nombre Mariyah Al-Qibtía (Mariyah, la copta) tuvo otro hijo con ella después de mudarse a Medina. Ese séptimo y último hijo se llamaba Ibrahim. Al igual que sus hermanos varones, Ibrahim falleció en su niñez; se dice que murió a los 17 o 18 meses de edad, y con una judía de nombre Safiah. Posteriormente tuvo varias otras esposas, de número impreciso entre éstas 9 reseñadas, que afirman casi todos los expertos como seguras, y las más de 20 que algunos le estiman. Algunas de estas mujeres eran esposas de seguidores de Mahoma muertos en batalla, mientras que otras eran hijas de sus aliados.

Muerte de Mahoma:

Después de una corta enfermedad, Mahoma falleció el 8 de junio de 632 en la ciudad de Medina a la edad de 63 años.
Abu Bakr, el padre de Aisha, la tercera mujer de Mahoma, fue elegido por los líderes de la comunidad musulmana como el sucesor de Mahoma, pues éste era el favorito de Mahoma. Cualquiera que hayan sido los hechos, lo cierto es que Abu Bakr se convirtió en el nuevo líder del islam. La mayor parte de su corto reinado la pasó combatiendo tribus rebeldes en lo que se conoce como las Guerras Ridda.
A la fecha de la muerte de Mahoma, había unificado toda la Península Arábica y expandido la religión islámica en esta región, así como en parte de Siria y Palestina.
Posteriormente los sucesores de Mahoma extendieron el dominio del imperio árabe a Palestina, Siria, Mesopotamia, Persia, Egipto, el Norte de África y Al-Andalus.

Descendientes de Mahoma:

A Mahoma le sobrevivieron su hija Fátima y los hijos de ésta. Los chiíes afirman que el esposo de Fátima, Alí y sus descendientes, son los verdaderos líderes del islam. Los sunníes no aceptan esta afirmación, si bien respetan a los descendientes de Mahoma.
Los descendientes de Mahoma son conocidos por diferentes nombres, tales como sayyid y sharif. Muchos líderes y nobles de los países musulmanes, actuales y pasados, afirman ser descendientes de Mahoma con variables grados de credibilidad, tales como la dinastía fatimí del Norte de África, los idrisíes, la actual familia real de Marruecos y Jordania y los imanes ismaelitas que usan el título de Agha Khan.